Es fácil encontrar un artículo de ropa que te guste en una linda tienda, pero no va con lo que ya posees, y te estás metiendo en un dilema. La regla de "los tres atuendos" mantiene tus compras de ropa checadas.
¿Alguna vez te ha pasado que encuentras algo que verdaderamente te gusta y llegando a casa te das cuenta que no combina con nada de tu guardarropa?
Así que terminas comprando más prendas, solamente para tener algo con qué combinarlo y vestirlo.
Sorpresivamente ese saco que estaba en rebaja te viene costando más de lo que costaba originalmente. Es ahí donde entra nuestra regla.
Antes de hacer una compra no planeada, regresa a casa y piensa en tres formas en las cuales puedas combinar tu guardarropa con esa prenda que te gustó en la tienda. Si no puedes, mejor ni lo compres.
A sabiendas de que tres prendas pueden ser combinadas con tu nueva compra, es probable asegurar que puedes vestirla muchas en varias ocasiones.
De esta forma puedes ir positivamente agregando más ropa a tu guardarropa sin tener que apilar prendas que después terminarán almacendas y endeudantote.
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