Era un vez, en un país del norte de México, dentro de la caótica ciudad del Pitic se encontraba un pequeño castillo de papel. Ahí vivía una princesita llamada Dauphine, quien tenía la maña de asustar a sus dueñas.
Era un vez, en un país del norte de México, dentro de la caótica ciudad del Pitic se encontraba un pequeño castillo de papel. Ahí vivía una princesita llamada Dauphine, quien tenía la maña de asustar a sus dueñas.