Ayer estaba desesperada por comer un panecito con mermelada de fresa, o alguna fruta citríca (endulzada).

Así que me he puesto manos a la obra en investigar los ingredientes, el costo entre qué tan barato me sale comprar los ingredientes a comparación de comprar estas delicias ya hechas, pero resulta que no encontré quién venda en esta ciudad, y cerca.

No quiero pasarme comiendo antojos, pero este frío está insoportable, y mi cuerpo está algo débil porque me intóxiqué debido a una cena que comí el jueves y viernes pasado.

¿Tienden a tener antojos después de haber estado enferm@s del estómago?

Lo importante es que me regresaron las ganas de comer, y ya no estaré en cama todo el día.

¿Les apetece un bollito? 😀

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Recuerden antes que nada: nada con exceso. Y seguimos salivando. Porque están de antojo los waffles caseros.

Estos desayunos me gustan cuando está uno super apurada. Solamente en esas situasiones ya que te aportan mucha energía los carbohidratos, pero el agregarle más energía de un poco de fruta no hace nada de daño.

Y cuando aun parece de noche, el calentador no da para más, y tienes hambre después de ir a caminar al oscuro parque, unos ricos bollitos te levantarán las comisuras de tu boca para mostrar felicidad por un rico postresito.

¿Dejas la panadería después del desayuno, o la panadería es tu desayuno?

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El último desayuno antes de un último festejo en el 2012. Qué mejor cuando hemos estado comiendo de todo, por no decir mucho.

Qué rico comer con la familia, un rico y sencillo desayuno. Mis padres con su acostumbrado café, y mi hermana y yo con té de canela, no del sobresito, sino de palillos.

A todos nos encanta el aguacate, y no tanto el huevo, pero estando en familia, uno recuerda lo tanto que compartimos. Estoy feliz, y espero que mi felicidad te contagie por este blog.

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